Si buscas un postre fresco, rápido y sin complicaciones, este cheesecake de fresa sin horno es ideal para disfrutar en casa sin encender el horno. Su base crujiente de galletas, su relleno cremoso de queso y su cobertura de mermelada de fresas casera crean una combinación deliciosa y equilibrada.
Perfecto para reuniones, celebraciones o simplemente para consentirte con un postre ligero y lleno de sabor.
⏱️ Tiempo de preparación: 25 minutos
❄️ Reposo en frío: 4 horas
🍽️ Porciones: 6-8 porciones
😋 Dificultad: Fácil
Ingredientes
- 250 g de queso crema
- Galletas Sultana o Ducales (cantidad necesaria para la base)
- 1 cucharada de mantequilla derretida
- 100 g de fresas frescas
- 4 cucharadas de azúcar morena
- 1 cucharada de esencia de vainilla
- Canela al gusto
- Nuez moscada al gusto
Preparación paso a paso
1️⃣ Preparar la mermelada de fresas
- Coloca las fresas troceadas en una olla con canela y 4 cucharadas de azúcar morena.
- Cocina a fuego lento hasta que suelten su jugo y se ablanden.
- Licúa las fresas y regresa al fuego hasta que la mezcla se reduzca y espese, formando una mermelada casera.
2️⃣ Preparar la base de galletas
- Tritura las galletas hasta obtener migas finas.
- Agrega la mantequilla derretida y mezcla bien.
- Vierte la mezcla en un molde y presiona firmemente con una cuchara hasta que quede compacta.
- Reserva en la nevera mientras preparas el relleno.
3️⃣ Preparar el relleno cremoso
- En un bol, mezcla el queso crema con 4 cucharadas de azúcar morena y la esencia de vainilla.
- Ralla un poco de nuez moscada al gusto y mezcla nuevamente hasta que el azúcar se disuelva.
- Reserva en la nevera por 10 minutos para que tome cuerpo.
4️⃣ Montar el cheesecake
- Vierte la mezcla de queso crema sobre la base de galletas y alisa con una espátula.
- Añade la mermelada de fresa sobre la superficie y distribuye con cuidado.
- Refrigera durante al menos 4 horas o hasta que esté firme.
Consejos y variaciones
🍓 Puedes decorar con fresas frescas en rodajas para una presentación más vistosa.
🍯 Si deseas un toque diferente, agrega un poco de ralladura de limón al relleno para un sabor fresco.
🥄 Sírvelo bien frío para disfrutar al máximo su textura cremosa.
Beneficios y curiosidades
- Sin horno: Ideal para verano o para cocinas sin horno disponible.
- Postre liviano: Perfecto para cerrar una comida de forma dulce y fresca.
- Fácil de preparar: No requiere técnicas complicadas ni utensilios especiales.
Con qué acompañar este cheesecake
Este cheesecake de fresa sin horno combina perfectamente con un café frío, una infusión de frutos rojos o un vaso de leche fría, convirtiéndose en el postre ideal para tardes calurosas o celebraciones con familia y amigos.
Conclusión
Anímate a preparar en casa este cheesecake de fresa sin horno, cremoso y con mermelada casera, y disfruta de un postre delicioso, fresco y sin complicaciones. Déjame en comentarios tu experiencia y comparte tu foto para motivar a otros a preparar esta receta en casa.
