
Hay postres que se vuelven parte de la vida, y esta tarta de chocolate francesa (Kladdkaka) es uno de ellos. Pegajosa en el centro, con bordes firmes y ese aroma irresistible a cacao, es la prueba de que menos es más en repostería.
Es tan fácil que casi parece trampa: fundir, mezclar y hornear. Pero la magia está en dos cosas: buen chocolate y vigilar el horno como si fuera una telenovela emocionante. Créeme, esta receta puede convertirse en tu as bajo la manga para cenas, cumpleaños o meriendas de domingo.
Ingredientes de la tarta Kladdkaka
- 165 g de chocolate negro (55 % – 70 % de cacao)
- 165 g de mantequilla
- 4 huevos (a temperatura ambiente)
- 130 g de azúcar
- 40 g de harina común o floja
- 1 pizca de sal en escamas
Cómo hacer la mejor tarta de chocolate del mundo
- Precalienta el horno a 180 ºC.
- Derrite el chocolate con la mantequilla en intervalos de 30 segundos en el microondas, removiendo para que no se queme.
- En un bol, bate los huevos con el azúcar y la sal (sin montar).
- Integra la mezcla de chocolate y mantequilla hasta que quede homogénea.
- Tamiza la harina sobre la preparación y mezcla suavemente con espátula.
- Vierte la masa en un molde engrasado o con papel de horno (22 cm de diámetro aprox.).
- Hornea entre 15 y 20 minutos. El truco: los bordes deben estar cuajados, pero el centro debe moverse como un flan.
Deja templar antes de cortar… si puedes resistirte.
Consejos para que salga perfecta
- Usa un chocolate de buena calidad, entre 60 % y 65 % es ideal.
- Mejor quedarse corto de cocción que pasarse: si el centro se cuaja demasiado, perderás la magia.
- Si quieres un extra, acompáñala con nata montada, frutos rojos o una bola de helado de vainilla.
Tiempo y porciones
- ⏱️ Preparación: 10 minutos
- ⏱️ Cocción: 18 minutos
- 🍴 Total: 26 minutos
- 👥 Rinde: 8 porciones
- 🥄 Dificultad: fácil
Valor nutricional aproximado (por porción)
- Calorías: 385 kcal
- Grasas: 22 g
- Proteínas: 5 g
- Carbohidratos: 40 g
Preguntas frecuentes sobre la tarta Kladdkaka
En sueco significa “tarta pegajosa”. Es un clásico que se sirve con el centro cremoso y los bordes firmes.
Obtendrás una tarta más seca, tipo bizcocho. Sigue siendo rica, pero perderá el toque fundente del centro.
Sí, puedes sustituir la harina por una mezcla sin gluten o incluso por almendra molida para un resultado más jugoso.